Dentro del ciclo sobre la historia de la peregrinación, José Manuel María García Osuna y Rodríguez, médico e historiador, interviene el 19 de agosto en Benavides de Órbigo (León); el tema, la reina Urraca de León. El conferenciante acaba de publicar un libro sobre esta mandataria.
Por Claudio Path
En la vida de Urraca, hija de Alfonso VI, tanto Compostela como Gelmirez tuvieron una notable importancia, con momentos particularmente difíciles.
El notable mandatario religioso compostelano creció al amparo de doña Urraca, llegada a Galicia en 1090, con su esposo Raimundo de Borgoña, para ponerse al frente del condado gallego, según dispuso Alfonso VI; pero a lo largo de los años la situación se fue complicando.
Difícil relación entre Gelmírez y la reina Urraca
La difícil relación entre Diego Gelmírez y la reina Urraca de León se sustentó en las ambiciones políticas del religioso gallego; en la nueva filosofía política de la iglesia de Roma y en la propia inestabilidad social europea. En el continente, el auge de la burguesía generó una inestabilidad urbana general. La agitación fue muy detectable en las ciudades hispanas del Camino de Santiago, por las que penetraba la gran influencia cultural de allende los Pirineos.
Gelmirez ( c. 1067-c. 1140) vivió en un periodo medieval en el que se reafirmó la fortaleza de la iglesia de Roma, la cual se benefició del impulso reformista de Gregorio VII. Este llegó a manifestar a los obispos, en un concilio celebrado en 1080: “que todo el mundo comprenda y sepa que si podéis atar y desatar en el cielo, podéis en la tierra quitar y conceder a cualquiera por sus meritos imperios y reinos, ducados, principados, marcas, condados y las posesiones de todos los hombres”.
El reinado de Urraca en general y las conflictivas relaciones con Gelmírez, en particular, serán temáticas que el próximo día 19 de agosto desarrollará José Manuel María García Osuna y Rodríguez. El conferenciante es autor del libro “Urraca I de León, primera reina y emperatriz de Europa”.
El impulsor internacional de Compostela
El mandatario gallego, impulsor del poder religioso y feudal de su sede episcopal, trabajó denodadamente para reposicionar la iglesia de Compostela en el conjunto hispano; Gelmirez contribuyó a suplantar la preeminencia de otros centros como Toledo, Braga y Mérida. Sus intensas relaciones con otros centros e instituciones corrieron parejas con su actividad de autopropaganda; con iniciativas como la redacción de la Historia Compostelana, crónica emprendida por su propia iniciativa, y del Códice Calixtino, o Código Calixtino.
Según García Osuna y Rodríguez, como mandatario episcopal, Gelmírez se consideraba representante de los obispos, que eran, por derecho, los pastores del rebaño cristiano, que debe ser disciplinado y obediente. Él sostenía que a estos prelados están sometidos tanto los reyes de las naciones, como los caudillos, los príncipes y todo el pueblo.
Los clérigos del scriptorium gelmiriano desarrollarán toda una teoría política en la que se potencia el papel de la iglesia, socavando la potestas regia.
Pragmatismo frente a las doctrinas hierocráticas.
La relación entre la soberana y el obispo Diego Gelmírez de Compostela estará, casi siempre, teñida de gran tensión. Aquella contestará con su inteligente pragmatismo a las teorías hierocráticas; las que aseguraban la superiodidad del poder religioso al temporal.
Aprendiendo de la realidad; apoyada en su aguda inteligencia, la reina desplegó una inconmensurable energía para superar los conflictos que afectaron a la Corona de León; hasta que a su muerte, en 1126, pasó el cetro a manos de Alfonso VII, quien años mas tarde recibiría el titulo de Imperator totius Hispaniae.
La conferencia se presenta a partir de las 20,00 horas del día 19, en el salón de actos de la Biblioteca Municipal de Benavides de Órbigo (León). Se integra en el ciclo sobre Historias del Camino, organizado por la Asociación de Amigos del Camino de Künig y el Ayuntamiento de Benavides de Órbigo.
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