Los caminos de Portugal tienen cada vez más peregrinos. El bello y desolador templo do Carmo, de Lisboa. Imagen de Beatriz Álvarez

Los datos del flujo de la peregrinación por el Camino Francés en 2019, según la estadística que difunde la Oficina de Peregrinación de Santiago de Compostela, muestran un evidente estancamiento.

Durante todo el año 2019  recogieron la “Compostela”, en la Oficina del Peregrino de la Archidiócesis de Santiago, 347.578 peregrinos. Es un nuevo récord absoluto de viajeros, ligeramente superior –en un 6 por ciento- al nivel de un año antes; un flujo que crece especialmente por el dinamismo jacobeo portugués.

En cuanto a los Caminos encabeza la estadística el Camino Francés, con 189.937 peregrinos. Son más que un año antes (186.199) pero si en el 2018 los peregrinos que elegían esta vía eran el 56,8 por ciento del total, en el 2019 ese porcentaje quedó en el 54,65 por ciento.

El efecto nocivo de la Compostela

Al popularizar –a través de la  credencial de la “Compostela”-  el “minitrayecto” Sarria-Santiago como justificación de haber peregrinado, se está ahondando una gangrena del peregrinaje. Si hace diez años apenas el 17 por ciento de los peregrinos se limitaban a ese recorrido, en la actualidad ya se acerca la cifra al 30 por ciento.

La consecuencia, un parque temático de paseantes entre las dos poblaciones (Sarria-Santiago), y una merma de peregrinos que salen de otras más lejanas.

Coincidencias reveladoras

En los datos sobre el Camino Francés en 2019 no encontraremos con coincidencias que revelan el problema:

En el 2019 salieron de Roncesvalles 4920 personas, frente a 5541 un año antes.

En el 2019 salieron desde Pamplona 3039 peregrinos, frente a 3482 el año anterior.

En el 2019 salieron desde León 10 505 peregrinos, en el 2018 habían sido  10.915.

En el 2019 salieron de Astorga 5513 peregrinos, en el año anterior habían sido  4.906.

En 2019 salieron de Ponferrada  6804 peregrinos, en el año precedente fueron 7209.

Consecuencia: Alza global del peregrinaje, pero estancamiento en el Camino Francés. Urge corregir el tema de la “Compostela” ampliando a 200 el número de kilómetros exigidos para ganarla a quienes vienen desde fuera de Galicia.

El peligro del «Parque temático»

De no hacerlo así el Camino de Santiago perderá esa aura de largo camino lleno de arte y paisajes, para trocarse en una especie de aburrida arteria urbana-parque temático con 100 kilómetros de recorrido, por donde circulan amontonados los paseantes con mochila.

Lejos habrá quedado el espíritu de viaje de arte, aventura y conocimiento.

La revitalización del propio Camino Francés pasa también por revitalizar vías alternativas del mismo, como la del Camino de Künig por los Montes de León y por Lugo. Es bueno dar más atractivos históricos y paisajísticos al viajero.

Más datos sobre el balance del 2019 en el Camino de Santiago